
Cruz relicario
Cruz relicario, realizada en Praga en el Barroco alto, oculta las reliquias del santo. A las reliquias se accede por la parte posterior de la cruz. Quitando los tres tornillos se desvelan las reliquias, que están envueltas en tela. El espacio en el que se encuentran, tiene como complemento una placa de plomo auténtica con el nombre del santo. La santísima reliquia es visible por la ventana, en la parte frontal de la cruz. En el exterior, la ventana está rematada por diez rubíes tallados y diez diamantes. Toda la cruz está lujosamente decorada con granates de Bohemia.
La base de la cruz está decorada al suntuoso estilo italiano de Ranzoni, con dos cabezas de ángeles y ramos de rosas, en combinación con cenefas planas decorativas.
Miniatura de Jesucristo en cruz
Ventana central flanqueada por rubíes y diamantes con vista a las reliquias.
Dos cabezas de ángeles – típicas en la obra de Ranzoni.
Anverso de cruz relicario con tornillos que cierran el receptáculo de las reliquias
Sello de contraste del autor Rinaldo Ranzoni.
Anverso de la cruz marcado con dos caracteres episcopales.